Las bandas elásticas han dejado de ser solo un accesorio para entrenamiento en casa. Ahora, muchos atletas y entrenadores las incorporan en máquinas de gimnasio para potenciar los ejercicios tradicionales. ¿Por qué? Porque las bandas agregan resistencia progresiva, mejorando la fuerza, la estabilidad y el crecimiento muscular. Si aún no las usas en tu rutina, aquí te explicamos por qué deberías empezar.

1. Resistencia progresiva: Más tensión en todo el recorrido

Las máquinas proporcionan un rango de movimiento fijo, pero cuando agregas bandas elásticas, introduces una resistencia que aumenta a medida que avanzas en el movimiento.

📌 Ejemplo: En el press de pecho en máquina, el peso suele sentirse más fácil en la parte final del empuje. Al añadir bandas elásticas, la resistencia crece en el punto donde más fuerza puedes aplicar, asegurando una activación muscular constante.

✅ Beneficio: Mayor tiempo bajo tensión = más ganancia muscular.

2. Reducción de puntos débiles y estancamientos

Uno de los problemas comunes al entrenar en máquinas es que la resistencia es uniforme y no se adapta a la fuerza natural de tu cuerpo. Con bandas elásticas, se refuerzan los puntos débiles y se mejora la potencia en la fase final del movimiento. 

📌 Ejemplo: En la sentadilla en máquina Hack, muchas personas tienen dificultad en la parte baja del movimiento, pero son más fuertes en la subida. Las bandas permiten que la resistencia sea menor en el descenso y aumente en la fase de ascenso, ayudando a superar estancamientos. 

✅ Beneficio: Mejoras en fuerza explosiva y superación de puntos débiles.

3. Menor impacto en las articulaciones

El uso de bandas distribuye la carga de manera más uniforme, evitando impactos bruscos en las articulaciones.

📌 Ejemplo: En el peso muerto en máquina Smith, añadir bandas reduce la carga inicial sobre la espalda baja, haciéndolo más seguro para quienes tienen molestias en la zona lumbar.

✅ Beneficio: Más seguridad y menos riesgo de lesiones.